Puede que todas las personas se encuentren frustradas en algún punto de sus vidas, algo completamente normal. Sin embargo, desarrollar la capacidad de tolerancia a la frustración puede ser una habilidad sumamente útil que valga la pena entrenar, pues es la mejor forma de sobrellevar este sentimiento negativo.
Si no sabes a qué se refiere esto, hay que mencionar que es una habilidad psicológica que se refiere a la capacidad de una persona para afrontar y sobrellevar situaciones, obstáculos o emociones difíciles sin perder el control emocional o la paciencia.
En otras palabras, implica la habilidad de lidiar con la frustración de manera efectiva y constructiva, en lugar de reaccionar de manera impulsiva o descontrolada.
¿Qué es la frustración?
La frustración es una respuesta emocional natural que experimentamos cuando nuestras metas, deseos o necesidades no se cumplen o son obstaculizados de alguna manera. Puede manifestarse como una sensación de enfado, tristeza, ansiedad o irritación, y es una parte común de la vida.
¿Qué es la tolerancia?
La tolerancia, en el contexto de la tolerancia a la frustración, se refiere a la capacidad de una persona para mantener la calma, la paciencia y la compostura en situaciones desafiantes o frustrantes. Implica no ceder ante la impulsividad, la agresión o la desesperación cuando las cosas no salen como se desean.
En un contexto general, la tolerancia se relaciona con la aceptación de la diversidad, ya sea en términos de opiniones, creencias, culturas o diferencias individuales. Significa respetar y aceptar a los demás, incluso si no estamos de acuerdo con ellos o si sus perspectivas difieren de las nuestras.
Se considera un valor de suma importancia, ya que fomenta un ambiente de convivencia pacífica y respetuosa, donde las diferencias se consideran enriquecedoras en lugar de divisivas.
¿Por qué algunas personas tienen más facilidad para sentirse frustradas?
La habilidad para sobrellevar la frustración varía de una persona a otra y puede estar influenciada por varios factores, entre los que se incluyen:
- Haber enfrentado situaciones frustrantes en el pasado pueden haber desarrollado una mayor tolerancia con el tiempo.
- Aquellos con habilidades efectivas para manejar el estrés y la adversidad a menudo tienen una capacidad de sobrellevar la decepción.
- Condiciones como la ansiedad, la depresión o el trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) pueden afectar negativamente la tolerancia a la frustración.
- La forma en que fuimos criados y educados también puede influir en esta habilidad.
- Las diferencias en la personalidad pueden desempeñar un papel importante. Algunas personas naturalmente un mayor desarrollo de esta habilidad.
- Padecer de estrés crónico puede reducir la tolerancia.
¿Cómo mejorar la tolerancia a la frustración?
Mejorar el control emocional ante los obstáculos es un proceso que requiere tiempo y esfuerzo. Sin embargo, se trata de un esfuerzo que vale la pena realizar. Por ello, te recomendamos que apliques algunas de las siguientes estrategias, las cuales pueden ser bastante efectivas para entrenar esta habilidad:
- Aprender a identificar emociones.
- Aprender técnicas de manejo del estrés y resolución de problemas puede ayudar a lidiar con situaciones frustrantes de manera más efectiva. Algunas de las más recomendables son la meditación y el control de la respiración.
- Practicar la aceptación de las circunstancias que no se pueden controlar.
- Establecer expectativas realistas, puesto que tener expectativas poco realistas puede hacer que las personas se frustren.
- Buscar apoyo al hablar con amigos, familiares o un profesional de la salud mental cuando se enfrente alguna decepción difícil de tolerar.
Ejercicios y estrategias para mejorar la tolerancia a la frustración
Existen ejercicios y estrategias específicas que pueden ayudarte a desarrollar una mayor capacidad de sobrellevar la decepción. Estos pueden incluir la meditación, la atención plena (mindfulness) y la práctica de la comunicación asertiva.
De igual forma, la terapia cognitivo-conductual también ha demostrado ser efectiva para mejorar la tolerancia a la frustración, de ahí que resulte idóneo obtener apoyo de un terapeuta para entrenar esta habilidad.
La baja tolerancia a la frustración y las personas con TDAH
Las personas con TDAH pueden experimentar una menor capacidad de controlar la frustración debido a la naturaleza impulsiva e inquieta de este trastorno, sobre todo en situaciones desafiantes.
Por tanto, las personas que padecen este trastorno muchas veces pueden requerir apoyo profesional. Asimismo, incrementar su resistencia ante la decepción puede ser también una necesidad más imperante.
¿Cómo se comportan las personas con baja tolerancia a la frustración?
Las personas cuya capacidad de soportar la decepción es baja pueden reaccionar de manera impulsiva, expresar enfado o irritación de manera intensa, y buscar soluciones rápidas a los problemas.
De la misma manera, pueden tener dificultades para lidiar con obstáculos o situaciones imprevistas y pueden sentirse abrumadas con facilidad. De esta manera, podrían acabar realizando los siguientes comportamientos:
- Autoagresión
Algunas personas pueden volverse críticas consigo mismas y pueden culparse por las situaciones frustrantes. Esto puede llevar a una disminución de la autoestima y un ciclo negativo de pensamientos autocríticos, lo que afecta negativamente a su bienestar y calidad de vida.
- Heteroagresión
En otros casos, en lugar de dirigir la frustración hacia sí mismas, algunas personas pueden expresar su enfado y malestar hacia otros. Como resultado, pueden volverse irritables o incluso agresivas verbal o físicamente, lo que puede afectar las relaciones interpersonales.
- Escape
Alternativamente, en lugar de afrontar la situación frustrante, algunos individuos pueden optar por evitarla. Esto puede incluir evadir la situación, distraerse o recurrir a comportamientos de evasión como el consumo de alcohol o sustancias.
Estos comportamientos de escapismo pueden afectar tanto la salud física como mental de la persona y la gravedad del impacto negativo dependerá de la naturaleza de los mismos, por lo que puede ser muy variable.
La frustración en niños
La frustración en los niños es una parte normal de su desarrollo, puesto que a medida que los niños crecen, están aprendiendo a lidiar con las emociones y situaciones desafiantes.
Por ello, es importante tener en cuenta que los padres y cuidadores desempeñan un papel crucial al enseñarles a los niños cómo manejar la frustración de manera saludable y constructiva. La mejor forma de conseguir esto es a través de la disciplina positiva, la cual debe aplicarse de acuerdo a la edad del niño.
La disciplina positiva para trabajar la frustración en niños
La disciplina positiva es una estrategia educativa que se centra en el respeto mutuo, la comunicación y la enseñanza de habilidades de afrontamiento a los niños.
Al usar la disciplina positiva, los padres pueden ayudar a los niños a comprender y manejar sus emociones de manera más efectiva, lo que contribuye a desarrollar una mayor tolerancia a la frustración.
Un ejemplo de disciplina positiva para abordar la frustración en los niños es el modelado de comportamiento. Consiste en que los adultos muestren a los niños cómo manejar situaciones frustrantes a través de su propio comportamiento. Por ejemplo, si un niño se siente frustrado porque no puede resolver un rompecabezas, un padre puede modelar la paciencia y la perseverancia al enfrentar un desafío similar.
Esto no solo enseña al niño una forma efectiva de lidiar con la frustración, sino que también refuerza la idea de que es normal sentirse frustrado a veces y que es posible superar estos sentimientos.
CONCLUSIONES SOBRE LA TOLERANCIA A LA FRUSTRACIÓN
Entrenar la resistencia ante la frustración puede ser muy útil para sobrellevar de la mejor manera posible las dificultades que las personas pueden enfrentar en cualquier momento.
En el caso de personas que padecen TDAH, resulta especialmente útil entrenar dicha habilidad, puesto que tienen naturalmente una resistencia a la decepción menor.
Por otro lado, aunque es posible obtener buenos resultados a través del aprendizaje de técnicas o prácticas como el mindfulnnes y la meditación, lo más efectivo es acudir con un especialista que pueda orientar en el entrenamiento de la tolerancia a la frustración.
Referencias Bibliográficas
- Leal, P., & Contreras, A. (1998). La baja tolerancia a la frustración y las adicciones. Liberadictus. Recuperado de: https://liberaddictus. org/Pdf/0202-17. pdf.
- Toala Zavala, K. L., & Rodríguez Pérez, M. L. (2022). Estrategias de afrontamiento y tolerancia a la frustración en adolescentes.
- Montero López, M. (2020). Autoconcepto, autoeficacia y tolerancia de la frustración: en niños con y sin dificultades de aprendizaje.
buenas noches. este tema también es de mucha ayuda para mí trabajo con las familias. mil y mil gracias.