En la sociedad actual sigue imperando la heteronormatividad y, desafortunadamente, los prejuicios y el acoso contra la comunidad LGTBIQ+ siguen siendo habituales.
En este escenario, vemos a muchos miembros de dicha comunidad sufriendo homofobia o transfobia interiorizada, esto es, el rechazo a la propia condición. Es aquí donde un terapeuta afirmativo puede proporcionar herramientas para desbloquear este rechazo, la vergüenza u otros sentimientos negativos que puedan aparecer y a la vez fomentar una mejor comprensión y aceptación. La Terapia afirmativa puede enseñar que no hay nada malo por ser parte de la comunidad LGTBIQ+.
A pesar de las campañas que reclaman la inclusión, la legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo y la educación contra el acoso en escuelas, la comunidad LGTBIQ+ sigue enfrentándose a retos recurrentes.
El colectivo LGTBIQ+ y la salud mental
Las obsoletas normas sociales que etiquetan a personas como «normales» o » no normales» crean una enorme presión para la comunidad LGTBIQ+. Estas presiones doblan la probabilidad de que los miembros de esta comunidad presenten un trastorno de salud mental en comparación con personas heterosexuales.
Las personas del colectivo son más propensas a experimentar problemas de depresión, ansiedad, conductas adictivas o/y autodestructivas y tienden en mayor medida a presentar comportamientos suicidas. El colectivo de personas LGTBIQ+ también padecen más trastornos alimentarios, como la anorexia o la bulimia nerviosa, que las personas heterosexuales.
Tasas de suicidio y depresión el la comunidad LGTBIQ+
Las tasas de suicidio y depresión son más altas en esta población. Estudios indican que en de los adolescentes LGTBIQ+ el riego a que manifieste conductas suicidas o haga intentos de suicidio es de un 40% mayor que en población heterosexual.
Además de los factores de tensión social «habituales», las personas LGTBIQ+ tienen que soportar el acoso, la discriminación y los abusos basados en su sexualidad y/o identidad de género.
¿Qué es la terapia afirmativa LGTBIQ+?
La psicología afirmativa se define como una forma de terapia que ayuda a las personas a aceptar su identidad, el género con el que se identifican y su orientación sexual y a ver más allá del perjudicial y habitual concepto de «normalidad» impuesto por una sociedad discriminatoria.
Por temor a ser juzgados y a ser discriminados, a muchas personas LGTBIQ+ les resulta difícil aceptarse como son y aceptar su identidad sexual o de género. Por desgracia, esto se manifiesta con frecuencia como transfobia u homofobia interiorizada para muchas personas LGTBIQ+.
El papel de un terapeuta afirmativo, en la terapia afirmativa para homosexuales y el resto del colectivo es crear un espacio seguro para que el paciente pueda expresar sus emociones, pensamientos y comportamientos y validar sus necesidades.
Terapias de conversión: un peligro para la salud emocional.
Desgraciadamente, a muchos terapeutas todavía les cuesta aceptar a las personas LGTBIQ+ como «normales». Como resultado, muchos de estos terapeutas proporcionan una atención inadecuada que puede interferir con el desarrollo del bienestar general.
Como caso extremo, cabe mencionar las conocidas “terapias de conversión”, en las que el terapeuta trata de “curar” la homosexualidad del paciente. A pesar de que actualmente es ilegal esta práctica, se sigue dando de forma clandestina. Es famoso el caso del obispado de Alcaná de Henares, que impartía cursos para dejar de ser homosexual.
El Europarlamento, publicó en Junio de 2022 un informe sobre estas supuestas terapias en el que se exponía que “al 5% de la comunidad LGTBIQ le han ofrecido terapias de conversión y que el 2% se han sometido a ellas”. El informe también habla de las consecuencias de estas prácticas: “pensamientos suicidas e intentos de suicidio, autolesiones, depresión, ansiedad y odio hacia uno mismo”. Así pues, las terapias de conversión además de ilegales son increíblemente peligrosa y clínicamente injustas.
Es interesante el visionado de la película de 2018 “Identidad borrada” (en versión original “Boy erased”) o la lectura del libro “Oh, ¡feliz culpa!” de Iván León para ver el funcionamiento de estas terapias y sus consecuencias.
El asesoramiento afirmativo nunca tratará de convertir o «reparar» la identidad sexual o de género de nadie.
¿Cómo puede ayudar la terapia afirmativa homosexual?
Los profesionales de la salud mental que ofrecen sesiones de terapia afirmativa homosexual animan a los pacientes a descubrir su autenticidad y a abrazar su género y su sexualidad sin sentirse culpables. Crean un espacio positivo para la autoaceptación y la comprensión del género, la sexualidad y la expresión de la identidad.
Los terapeutas y psicólogos que aplican la psicología afirmativa saben que es imprescindible crear un entorno seguro para que las personas LGTBIQ+ puedan revelar su verdadero yo sin miedo a ser juzgadas.
Éstas acuden a la terapia para resolver sus problemas de relación y trabajar sus dificultades emocionales. Problemas como la depresión, la ansiedad, el abuso de sustancias o los traumas son trastornos de salud mental que en ocasiones impactan más sobre las personas del colectivo LGTBIQ+.
Lo que ocurre es que los miembros de esta comunidad experimentan un añadido adicional de vergüenza y miedo relacionada con su identidad de género u orientación sexual. Al fin y al cabo, hace sólo unas décadas la homosexualidad se consideraba una enfermedad mental y, por desgracia, en algunas partes del mundo sigue siéndolo.
Familiares y amigos durante la terapia afirmativa homosexual
La falta de apoyo y comprensión por parte de familiares y amigos puede ser muy dolorosa. La ausencia de este apoyo, en ocasiones contribuye a un profundo sentimiento de soledad que puede acabar provocando un problema de salud mental. Algunas personas recurren a estrategias perjudiciales para hacer frente al estigma y la discriminación, como el aislamiento, autolesiones y el abuso de sustancias. También pueden surgir temores debilitantes, violencia, depresión, ansiedad y TEPT.
La terapia ayuda, en primer lugar, a identificar y reconocer el origen del comportamiento perjudicial y a sustituirlo por una estrategia de afrontamiento saludable para que la persona LGTBIQ+ pueda encontrarse, aceptarse y quererse a sí misma.
Y en segundo lugar, ayuda a relativizar cualquier actitud negativa que el paciente pueda recibir de su entono familiar, que es el que generalmente preocupa más ya que implica “salir del armario” ante padres, tíos, abuelos y demás personas que pertenecen a una generación en la que la homosexualidad estaba mal vista.
Conclusión sobre la Terapia afirmativa
Es evidente que la el colectivo LGTBIQ+ sigue sufriendo ataques por algunos partidos políticos y alguna parte de la sociedad, también sigue existiendo el bulling al chico amanerado de la clase o la reticencia a contratar personal transexual. Queda mucho por hacer a nivel político, social e institucional.
Ante esto, es importante que las personas del colectivo cuiden en especial su salud mental y trabajen la autoaceptación con herramientas como la psicología afirmativa homosexual.
Así, la terapia psicológica afirmativa debe centrarse en ayudar al paciente a entender que lo que piensa, siente o desea es natural y una parte importante de lo que es. El terapeuta afirmativo debe estar capacitado y preparado para trabajar cuidadosamente las necesidades y expectativas del cliente. Es importante recordar que la terapia afirmativa se centra en la relación del cliente con sus sentimientos e identidad.
Referencias bibliográficas
- Quesada Grande R, (2019) La salud mental de los jóvenes gays, lesbianas, bisexuales, transexuales, intersexuales y queer. https://repositorio.uam.es/bitstream/handle/10486/691510/quesada_grande_rocio.pdf?seq
- Martín, G. J. (2016). Quiérete mucho, maricón. Barcelona: Roca editorial.
- Freitas De León, P., & Freitas De León, P. (2018). Reseña: “Terapia afirmativa: una introducción a la psicología y a la psicoterapia dirigida a gays, lesbianas y bisexuales”. Psicología, Conocimiento y Sociedad, 8(1), 246-254. https://doi.org/10.26864/pcs.v8.n1.13