En la escuela nos enseñan que tenemos cinco sentidos: vista, gusto, olfato, tacto y oído.
¿Pero sabias que en realidad son 7 ? Los otros dos sentidos, no tan conocidos, son:
- el sentido vestibular
- el sentido propioceptivo
¿Qué es el sentido vestibular?
Básicamente, nuestro sentido vestibular nos ayuda a «controlar» la posición y el movimiento de nuestra cabeza. Sin embargo, nuestro sistema vestibular es el sistema sensorial más conectado de nuestro cuerpo. Funciona junto con los demás sistemas sensoriales (incluido el sentido propioceptivo), lo que nos permite utilizar eficazmente los ojos y procesar los sonidos de nuestro entorno.
Dependiendo de cómo movamos la cabeza (rotación/dirección/velocidad), unas células especializadas envían señales a nuestro cerebro, que luego «informa» de la reacción de nuestro cuerpo.
Nuestro sistema vestibular tiene un impacto muy básico en nuestras habilidades físicas, emocionales y de aprendizaje
El primer sistema vestibular y su desarrollo en el bebé
Es el primer sistema sensorial que se crea y desarrolla en el útero. Cuando el feto tiene sólo 5 meses, su sistema vestibular está increíblemente bien desarrollado.
El sistema vestibular proporciona al cerebro del feto en crecimiento una gran cantidad de información sensorial, ya que el feto se balancea de un lado a otro por los movimientos de su madre.
El Cerebro: el emisor del sentido vestibular
Después de nacer, nuestro sistema vestibular suele compararse con el «controlador de tráfico del cerebro» para toda la información sensorial que recibe.
Clasifica y transmite la información sensorial que llega de otros órganos sensoriales y la transmite a las distintas regiones sensoriales de nuestro cerebro.
Por ejemplo, el sistema vestibular enviá al cerebro las señales de si está de pie o sentado, o si se está moviendo y, en ese caso, a qué velocidad y en qué dirección. El sistema vestibular consta de dos vías de entrada, los canales semicirculares, que indican los movimientos de rotación, y los otolitos, que indican las aceleraciones lineale
Cuando se da una descompensación en el sistema vestibular, el cuerpo no se mueve con confianza, suavidad y seguridad.
Los niños pueden tener dificultades con el equilibrio y la coordinación. Puede hacer que sean temerosos o impulsivos. Puede ser un grave problema de seguridad. Un niño puede saltar desde una superficie alta, como un mueble, y lesionarse porque no puede calcular la altura o la distancia.
El sistema vestibular: los sentidos y la ubicación espacial
El sistema vestibular es una parte del sistema somatosensorial dentro del sistema nervioso. Se encarga del «movimiento y equilibrio».
Los vestíbulos (receptores) están ubicados en el oído interno y detectan el movimiento.
Hay 3 canales, orientados en diferentes posiciones que son estimulados por cambios en la posición de la cabeza y detectan todos los diferentes planos de movimiento.
Usamos nuestro sentido vestibular para saber hacia arriba o hacia abajo, o la velocidad con la que nos movemos.
El sistema vestibular tiene una amplia influencia en muchas partes del cerebro y se proyecta hacia:
• El cerebelo (para regular los movimientos de la cabeza, postura y ojos)
• Los nervios craneales III, IV y VI (para permitir que los ojos se fijen en un objeto en movimiento mientras permanece enfocado)
• Formación reticular (para indicar cómo ajustar la circulación y la respiración cuando el cuerpo adopta una nueva posición)
• Médula espinal (para permitir reacciones reflejas rápidas relacionadas con el equilibrio)
• Tálamo (para controlar las respuestas motoras de nuestro cuerpo y cabeza)
¿Por qué es importante el sentido vestibular para el desarrollo del niño?
El sentido vestibular es crucial para el desarrollo del niño, ya que le ayuda a trabajar, descansar y jugar. Un sistema vestibular típicamente receptivo permite al niño sentirse seguro y confiado en su cuerpo, de modo que pueda moverse, atender para aprender y descansar.
El sistema vestibular también puede compararse con el «botón de control de volumen» del cuerpo, ya que los movimientos rápidos de la cabeza hacia arriba y hacia abajo o los giros tienden a «despertarnos», mientras que los movimientos más lentos de la cabeza, o el mantenimiento de la misma, nos ayudan a calmarnos.
Significa un buen equilibrio. Nuestro sistema vestibular es como un giroscopio para el niño.
Sin un sistema vestibular que funcione correctamente, un niño puede tener dificultades para «sostenerse» adecuadamente.
Puede que opte por tumbarse en el suelo en lugar de sentarse durante la hora del círculo o que se apoye en el codo mientras está en su escritorio.
Los niños pueden gestionar este problema de un «sistema vestibular adormecido» tendiendo a soñar despiertos o, por el contrario, pueden querer moverse e inquietarse, ya que esto estimula su sistema vestibular.
La descompensación vestibular puede manifestarse como hipersensibilidad o hiposensibilidad.
Ejemplos de integración de sistema vestibular en la infancia:
Por ejemplo, un niño puede marearse demasiado con un pequeño giro o no marearse en absoluto con un giro rápido.
Otro ejemplo, cuando un niño se tambalea sobre una pierna para vestirse, su sistema vestibular detecta los movimientos de la cabeza, enviando señales al cerebro, que después de procesarlas, envía señales al cuerpo, indicándole cómo responder y mantener el equilibrio.
La buena noticia es que el sistema vestibular de tu hijo puede fortalecerse con estimulación vestibular
Terapia para la reeducación y estimulación vestibular de los niños
La integración sensorial (IS) se está haciendo cada vez más popular.
Aunque todavía está lejos de ser comprendido por todos los profesionales los responsables de la toma de decisiones médicas y el público en general en el ámbito de la infancia.
La SI se ha practicado ampliamente en los países anglosajones desde la antigüedad.
En los países anglosajones hay un número creciente de especialistas europeos.
La razón principal es que tiene sentido para el desarrollo de los niños con necesidades especiales, para que tienen dificultades especiales para que puedan progresar en todas sus áreas de desarrollo. Si el sistema vestibular de un niño no funciona bien, puede parecer torpe.
En nuestro sala de terapia de integración sensorial en el Prat de Llobregat, la terapeuta ocupacional puede ayudarte y diseñar lo que se llama una «pauta sensorial» para las necesidades vestibulares específicas de tu hijo o hija.
¿Cómo trabaja el terapeuta ocupacional la estimulación vestibular?
El terapeuta ocupacional evaluará al niño para determinar a qué estímulos sensoriales reacciona de forma exagerada y a qué estímulos reacciona de forma insuficiente, y luego calibrará los estímulos sensoriales para que se adapten al niño donde se encuentre y le ayuden a avanzar.
Una observación y refuerzo sensorial (dentro y fuera de la sala de estimulación sensorial) puede incluir cosas como:
◉ rebotar con un mini trampolín o una pelota terapéutica
◉ balancearse en una hamaca o un columpio
◉ girar en una silla giratoria o sentarse en un columpio
◉ balancearse en una silla mecedora o en un caballito de balancín
◉ trepar por una escalera o por los juegos infantiles
◉ colgarse boca abajo de las barras del mono o del trapecio
◉ juegos al aire libre, como el fútbol o la pelota
◉ toboganes
◉ nadar
Esta es sólo una pequeña muestra de los cientos de opciones que existen para crear una construir una pauta sensorial y tratar la disfunción vestibular.
Resultados del trabajo con la estimulación vestibular
Los ejercicios vestibulares, mejoran el seguimiento visual (mantener una imagen visual fija mientras se observa un objeto en movimiento) y la motricidad fina de las manos. Favorece el desarrollo del lenguaje al integrarse con nuestros sentidos auditivos y visuales.
Es importante trabajar estrechamente con un OT, ya que si se sobreestimula el sistema vestibular se puede empeorar el desajuste vestibular. A menudo basta con unos pocos minutos de actividad vestibular al día.
Ayuda al autocuidado y a la independencia del niño al coordinar ambos lados de su cuerpo.
El sentido vestibular está desajustado en niños diagnosticados con:
✧trastorno del espectro autista
✧trastorno de procesamiento sensorial
✧trastorno por déficit de atención e hiperactividad,
✧retrasos del lenguaje
✧discapacidades del desarrollo.
Síntomas son comunes del desajuste vestibular
Camina/corre de forma inestable o cautelosa
es torpe y se cae con frecuencia sin motivo aparente
dificultad para quedarse quieto o no puede mantener la atención/concentración sin moverse
no se marea con demasiados giros o se marea demasiado con pocos giros
Tiene miedo/no le gusta o busca/disfruta de actividades en las que los pies abandonan el suelo, como columpios, toboganes, saltos, escalada
no le gusta tener la cabeza inclinada hacia atrás
control postural deficiente, se encorva/se cae de la silla
escasa coordinación mano-ojo, pie-ojo
parece no ser consciente de los riesgos de la altura o de los equipos en movimiento.
el sentido propioceptivo
El término «propioceptor» se ha utilizado habitualmente para referirse a los receptores relacionados con las sensaciones conscientes como: los sentidos de posición y movimiento , el sentido de la tensión o la fuerza, el sentido del esfuerzo y el sentido del equilibrio.
¿Qué es la propiocepción consciente?
La propiocepción consciente es la facultad de activar el movimiento de los músculos de manera voluntaria en base a la información sensorial del cuerpo.
Es decir es la comunicación entre la mente y el cuerpo. Los sensores situados en el interior del cuerpo producen información sensorial y la transmiten al cerebro a través del sistema nervioso. Por consiguiente, la propiocepción consciente provoca que el cerebro mande a todo el cuerpo las indicaciones necesarias para la posición, el movimiento y el equilibrio del cuerpo.
La propiocepción consciente se transmite al cerebro a través de la vía del lemnisco medial de la columna dorsal. La vía de la columna dorsal y el lemnisco medial es una vía sensorial que transmite sensaciones situadas en la piel y las articulaciones al tálamo y la corteza cerebral.
¿Qué es la propiocepción inconsciente?
La propiocepción inconsciente es la activación del movimiento muscular de según la información sensorial del interior del cuerpo sin necesidad de pensar en el movimiento.
La propiocepción inconsciente se conecta al cerebelo a través del tracto espinocerebeloso dorsal y el tracto espinocerebeloso ventral. El tracto espinocerebeloso dorsal pasa la información sensorial de los músculos esqueléticos y las articulaciones al cerebelo. El tracto espinocerebeloso ventral transmite la información sensorial del cuerpo al cerebelo.
La propiocepción inconsciente a menudo muestra respuestas reflejas de corrección dee posición relativa, movimiento y equilibrio del cuerpo.posición relativa, el movimiento y el equilibrio del cuerpo.
La propiocepción inconsciente también hace que el cerebro envíe las señales necesarias a todo el cuerpo para mantener la posición relativa, el movimiento y el equilibrio del cuerpo.
Diferencias entra la propiocepción consciente y la propiocepción incosciente.
La propiocepción consciente se refiere a los movimientos de los músculos voluntarios. Permite ser consciente de la información sensorial del cuerpo antes de realizar los movimientos musculares.
La propiocepción consciente se relaciona con el córtex cerebral y el tálamo para realizar los movimientos.
La propiocepción inconsciente consiste en el movimiento involuntario de los músculos. Esto hace que se active un movimiento corporal en respuesta a la información sensorial sin necesidad de pensar antes del movimiento muscular.
La propiocepción inconsciente se comunica con el cerebelo y muestra respuestas reflejas de equilibrio.
Me ha sido de mucha utilidad para entender más sobre este nuevo sentido tan desconocido e imprescindible. Muchas Gracias.
Gracias Belén.
Hola, me parece muy interesante que se hable de los 7 sentidos. Pero ¿cuáles serían los órganos que se relacionan con los sentidos vestibular y propioceptivo?
¡Gracias!
Hola, Los receptores vestibulares están ubicados en el oído interno que transmitirá la información que obtenga al cerebelo (para regular los movimientos de la cabeza, postura y ojos), nervios craneales III, IV y VI (para permitir que los ojos se fijen en un objeto en movimiento mientras permanece enfocado), formación reticular (para indicar cómo ajustar la circulación y la respiración cuando el cuerpo adopta una nueva posición), médula espinal (para permitir reacciones reflejas rápidas relacionadas con el equilibrio)
y el tálamo (para controlar las respuestas motoras de nuestro cuerpo y cabeza)
Muchas gracias por tan interesante material y la claridad expresada en el mismo.